¿Los bosques alivian el insomnio?
Olivia Palacios-Wassenaar y Gonzalo Castillo-Campos
Entre las plantas del bosque de niebla, el trompillo o flor de tila (Ternstroemia sylvatica) se utiliza contra el insomnio por sus propiedades relajantes.
Los bosques y selvas están conformados por miles de especies de plantas y una buena parte de ellas tienen usos conocidos, tanto para los pobladores locales como para personas en lugares lejanos, incluso en otros países. Entre estos usos destacan los maderables, comestibles, ornamentales y medicinales. Y además, hay muchas especies que aún no han sido estudiadas para descubrir sus usos potenciales.
Entre las muchas especies que crecen en los bosques de niebla del estado de Veracruz, podemos mencionar una muy utilizada para calmar los nervios, reducir el insomnio y la ansiedad: el trompillo (Ternstroemia sylvatica) conocida también como flor de tila, tila o hierba del cura, entre otros nombres locales. En los mercados de la región se pueden conseguir sus frutos y flores, muy recomendados para tratar estos problemas, debido a que las infusiones o tés preparados con ellos tienen propiedades relajantes. Las flores al someterse al calor con agua desprenden un aroma fresco y agradable; también se conoce que tiene propiedades antiinflamatorias.
Los usos que le dan a esta planta pueden variar según el lugar de donde proviene. Y así, se conoce que en Oaxaca, es utilizada para aliviar dolores de cabeza; en Jalisco, para la tos; y en Michoacán, para aliviar problemas reumáticos. En algunas zonas montañosas de Veracruz, utilizan una cataplasma elaborada con las hojas para desinflamar golpes. La madera se utiliza para fabricar partes de instrumentos musicales, cuentas para collares, cucharas y molinillos.
Estas propiedades medicinales del trompillo han sido documentadas en diversos estudios, pero falta mucho por conocer. El problema fundamental es que estos árboles solo se desarrollan en los bosques originales y cuando los bosques son sustituidos por cultivos y pastizales dedicados a la ganadería, además de la extracción indiscriminada debido a la utilidad de las plantas, se pone en riesgo la existencia de estas especies. Y de ahí la importancia de conservar nuestros bosques, que constituyen un patrimonio natural imposible de recuperar a corto plazo. Para lograr la recuperación de los bosques en una zona tropical, se requiere, cuando menos, unos cincuenta años. De todos modos se pierden entre 50 y 60 % de las especies arbóreas, arbustivas y herbáceas propias de los bosques originales. Es probable que la funcionalidad de los servicios ambientales que se obtienen del bosque se logre recuperar. Sin embargo, la pérdida de la diversidad ligada a la evolución de las especies en su hábitat, es prácticamente imposible recuperarla en 90-100%. Por esa razón es muy importante conservar áreas de bosque originales que permitan preservar una gran parte del germoplasma original de los bosques para las futuras generaciones humanas.
Por ello podemos afirmar que, sin lugar a dudas… ¡la desaparición del bosque nos debería producir ansiedad e insomnio!
“La opinión es responsabilidad de los autores y no representa una postura institucional"